15.3.09

TELEMIERDA. La televisión local, esa gran desconocida.

La televisión a veces es una amante exigente, y no todos los que sueñan con llegar a lo más alto pueden conseguirlo. Por eso, cuando tus sueños y esperanzas de convertirse en el nuevo Ramón García se van por el sumidero, no queda más remedio que arrastrarse hasta esa putrefacta cloaca llamada Televisión Local. Alli, tendrás ocasión de presentar informativos y que sólo te vea tu madre, y si lo haces bien, serás ascendido al siempre innovador mundo de los concursos de madrugada.

Algo así le ocurrió a nuestro protagonista de esta noche, mi tocayo Óscar Vidal, un calvo con gafas y una expresión de lo más agradable, que nos deja entrever desde el minuto 1 que es una bellísima persona. Por desgracia, en el mundo no todas las personas son tan agradables como GodZatu o como yo. Hay monstruos, seres despreciables cuyo único objetivo es hundirte y hacer de tí un ser miserable.

El video que muestro a continuación, es una feroz y desgarradora muestra de la crueldad que asola el mundo en el que vivimos.



Cierto es que el cobro por la llamada es desmesurado si tenemos en cuenta el valor del premio, unas repugnantes entradas de cine. Cierto es que el puto objeto no hay Dios que lo acierte. Cierto es que Cinecito es un ser despreciable que merece la más horrible de las muertes. Pero acaso no merecemos los seres humanos un trato justo y respetuoso?

Un par de videos más se encuentran por la red relatando el calvario de ese pobre hombre, que acabó pidiendo la baja por depresión y la jubilación anticipada. A mi, como persona y tocayo, eso si, más guapo y con más pelo, se me saltan las lágrimas. A Billy también.

2 comentarios:

juanele dijo...

que penica da el pobre..
casi como tu^^

GodZatu dijo...

Juanele . . . you suck!

Pray for Moyo!